Ventajas e inconvenientes de la geolocalización
Hay que ver esta tecnología desde una doble perspectiva, ya que nos permite a
nosotros mismos localizar la ubicación exacta
de todo tipo de objetos y lugares, pero a la vez nosotros también somos
localizables por otros.
Gracias a la
geolocalización podemos planificar rutas de viaje, localizar
lugares de interés
comercial, cultural o personal, o nos aporta información como el tráfico
o el tiempo. Además, todo esto lo podremos llevar a cabo de manera casi
inmediata.
Todo esto nos ha ayudado a la hora
de interactuar con otras personas sin importar el lugar del mundo donde se
encuentren. Gracias a esta tecnología unida a aplicaciones como las redes sociales, el hecho de compartir fotografías
o ubicaciones con
otros del lugar donde estamos, ya es algo posible a la vez que habitual.
Incluso hasta
algunos juegos hacen uso de nuestra ubicación física para ofrecernos una mejor experiencia
de uso en nuestros momentos de ocio. Pero mientras que nosotros podemos
localizar lugares al momento, nosotros también
podemos ser localizados con la misma precisión. Esto es
algo que, a veces, puede perjudicarnos, ya que es algo que afecta directamente a nuestra privacidad.
Debemos tener en cuenta que cualquier persona con ciertos conocimientos
informáticos puede descifrar nuestra posición a través de los sistemas de geolocalización que incorporan las aplicaciones que tenemos
en nuestros teléfonos móviles,
y algunas de ellas activan la geolocalización sin pedirnos
permiso, vulnerando nuestra privacidad y, en cierta medida, poniéndonos en
peligro.
Por ejemplo,
hay algunas que saben en todo momento nuestros hábitos, gustos, rutas habituales, etc. Esta información puede ser
útil para muchas compañías a la hora de vendernos sus productos a través de Internet, pero no para nosotros si esa información llega a ponerse
en malas manos.
Además, mediante otras como Google Maps, podemos descubrir
nuevos lugares y su ubicación, ver puntos de interés que hayamos buscado
anteriormente cuando pasemos cerca de alguno, o saber dónde se encuentran
nuestros amigos y viceversa.
Las aplicaciones con sistemas de geolocalización también son
capaces de avisarnos sobre el tráfico y el clima meteorológico y, cuando
detecten cualquier anomalía, nos guiarán por las rutas más seguras y rápidas.
Así, algo que
cada vez hacemos más es compartir nuestros desplazamientos, viajes y rutas en las redes sociales, por lo que un delincuente podría saber en todo
momento dónde estamos o el tiempo que vamos a tardar en volver a casa, incluso
la ruta a seguir en el trayecto.
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